A parte de las disfunciones que tienen nombre y apellidos, tratamos otro tipo de problema que a veces no tienen un camino de trabajo específico.
No por ello dejan de ser importantes. Todo aquello que esta impidiendo que tengas una vida normal, que está afectando a tus relaciones personales y sexuales, se necesita hablar y tratar. Reconocerlo es el primer paso; buscar ayuda el segundo.